Resoluciones de fin de año? Piénsalas distinto…

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Las 24:00 hs del 31 de Diciembre representan el cierre de un año para TODOS, pero para ALGUNOS, el comienzo de un nuevo MAÑANA.  Y en un deseo noble de mejorar o trascender, MUCHOS de ellos comienzan a escribir las 10 cosas que harán en el nuevo año. Bueno, yo era uno de ellos…

La verdad es que no tiene nada de malo hacerlo, solo que esa lista no suele tener la FUERZA suficiente como para acompañarte a lo largo de los doce meses, ya que no incluye motivos (y menos planes), sólo deseos. Impulsos fuertes, vibrantes, pero deseos al fin: “quiero balancear más mi vida personal y laboral”; “en este 2013, me tomaré las cosas con más calma”; “comenzaré el gimnasio 2 veces por semana a partir del 1 de enero”; “empezaré a estudiar inglés”; “volveré a mi peso ideal, 3 kg menos”; “incursionaré en nuevos negocios”; “aprenderé algo nuevo”; “pasaré más tiempo con mis hijos (o seres queridos)”; “buscaré un nuevo trabajo”; “dejaré de fumar”; “seré más frontal con mi jefe”… Sabes a lo que me refiero!…

¿Dónde está la diferencia entonces? Fíjate que dije ‘motivos’ porque, cuando uno tiene MOTIVOS – al menos uno – , quiere que su vida comience, o recomience, lo antes posible. Tomamos conciencia del tiempo, que no está garantizado, y queremos aprovecharlo.

– “Yo siempre tengo mis motivos para planear lo que quiero hacer” – podrías decirme.  OK. Pero recuerda que los motivos a los que me refiero no son razones, sino más bien INTENCIONES, anhelos fuerza. Te lo digo con otras palabras: las razones son mentales, las intenciones emocionales. Y si hay algo que mueve, vibra y recicla tu energía interior son los sueños – o aquello que te emociona al punto de quitarte el sueño -, no los planes. El plan te da certezas, no desafíos. Y lo que necesitas para vencer la inercia actual, esté en el grado que esté, son desafíos, nuevos o reciclados, aquellos que te motivan con solo pensar en ellos.

¿Y entonces?

Te propongo hacerte PREGUNTAS, no checklists. Al menos primero preguntas, y luego continúa con tus checklists. Son 22 preguntas que expanden tu conciencia, trascienden tus miedos, focalizan tu atención y ponen un porquito en jaque tus creencias actuales, no para cambiar todo esto de una sola vez, sino para que puedas re-conectarte con lo que trajo hasta aquí. ¿Te animas? Sólo debes querer estar un rato a solas contigo mismo/a. Y disfrutarlo.

1.¿Qué pasaría si dejo de buscarle explicaciones, culpables o razones a TODO lo que ocurre y me impacta?
2.¿ Estoy esperando siempre tener confianza total en mi mismo/a  antes de moverme al siguiente nivel?
3.¿ He considerado últimamente renovarme como una opción?
4.¿ Cuál sería el máximo riesgo de ser lo que SOY, en vez de lo que otros pretenden que SEA?
5.¿ Habrá alguna posibilidad de que cambie yo primero, antes de pedirles (o esperar) a que otros lo hagan?
6. ¿ Podría considerar el movimiento entre lo que soy y lo que quiero ser como una manera de seguir creciendo, antes que como un imperativo que satisfaga a otros?
7.¿Y si lo que no logré en el PASADO fuera sólo parte de la EXPERIENCIA que necesitaba para hacerlo BIEN esta vez?
8.¿ Qué pasaría si dejo de ver las cosas que me pasan como CASUALIDADES y las observo como COINCIDENCIAS?
9.¿ Podría abandonar mis emociones negativas y pensarlas ya como ‘no relevantes’ para lo que me propongo hoy en mi vida?
10.¿ Qué fue posible este año que creía imposible hasta hace poco tiempo atrás? ¿Qué me dice eso?
11.¿ Qué tan difícil percibo la brecha entre lo transaccional y lo transformacional? (entre ‘hacer más de lo mismo’ y ‘hacer un cambio profundo’)
12.¿ Qué fue lo peor que me pasó durante el año que pasó? ¿Era uno de mis miedos? ¿Fue tan grave como me lo imaginé tantas veces en ellos?
13.¿ A quién/quiénes (más) podría hacerle más fácil, más reconfortante, más intensa su vida?
14.¿ En qué relaciones o proyectos crecí colectivamente, con algún otro (u otros)? (proyectos en donde no podría haber sido exitoso sin un ‘otro’)
15. ¿ Qué puedo aprender de lo mejor que me ha paso durante estos doce meses?
16.¿ Puedo frenar un minuto y felicitarme por lo que haya logrado este año?
17.¿ Qué puedo aprender de lo peor que me ha pasó durante estos doce meses? ¿Puedo convertir eso en una experiencia de aprendizaje?
18.¿ Qué transferí este año de lo que aprendí?
19.Y si dejo de esperar a que se den TODAS las CONDICIONES para animarme y me juego por lo que siento es lo mejor?
20.¿Qué me pasó, qué sentí, al experimentar las consecuencias de mis decisiones? ¿Algo para rescatar?
21.¿Qué tanta tensión estaría dispuesto a soportar, en términos de sentirme vulnerable, antes de pasar al siguiente nivel de coraje?
22.¿ De dónde podría sacar el coraje que preciso para responder honestamente estas preguntas y llevar adelante los objetivos que de ellas podrían emerger?

De TI mismo, de nadie más, deberían partir las respuestas.

Luego vuelve a elevar la mirada y mira a tu alrededor. Allí hay Amor. Amor es la fuerza que une. Utiliza esa fuerza para fijar, ahora sí, objetivos  desafiantes. Que te hagan reír un poco al decirlos en voz alta. Que te hagan sentir que no puedes lograrlos solo. Que te hagan crecer en las cuatro dimensiones (cuerpo, mente, corazón y espíritu). Entonces, primero, Agradece y Cuida. Luego Persigue. Porque así, será más  divertido, más digno. Para ti y para tu comunidad. Y luego, de paso… BRILLA.

Un abrazo fuerte, seas quien seas, estés donde estés, y que tengas un EXCELENTE 2013.        Alejandro Delobelle

Ps. > Ensayo una respuestas a las preguntas de arriba, si te sirven u orientan, será… magnífico!

1. Probablemente nada. ‘Fluir’  te brindará perspectiva oportuna, intenta hacerlo: no confrontar impulsivamente, no evitar totalmente.

2. Aprende haciendo, arranca cuando tengas un 70% de certezas y siente la adrenalina.

3. Hazlo cada tanto, para no tener que hacerlo por obligación.

4. Esos no son riesgos mi amigo, son bendiciones. Naciste para ser único.

5. Claro que sí! Pruébalo un vez y conviértelo en hábito de a poco. Tu mirada del mundo cambiará. Y el resto ‘mágicamente’ también lo hará.

6. Es tu Ritmo. Tu vida. Se trata de tus Decisiones. Tus Consecuencias. Tu Manera de Crecer. Pon energía + estrategia en movimiento.

7. Si puedes comenzar a pensarlo de esa manera, estarás en paz con tu pasado, con tus decisiones. Libre, liviano, para volver a actuar. Inténtalo!

8. La casualidad es azar, en la coincidencia confluyen factores por alguna razón. Sólo préstales un poco más de atención.

9. Si no son relevantes no impactan, si no impactan no contribuyen y, si no contribuyen, no facilitan tu camino. Identifica las que te frenan y potencian, para poder regularlas o liberarlas.

10. Escúchate, eso es experiencia de primera mano. Quizás lo único que te limitaba eran tus creencias…

11. Hasta los cambios profundos empiezan con pequeños pasos, logros mínimos. Nadie es padre de un día para el otro!

12. Si sigues de pie luego de soportar  eso que era lo peor, sabes que de aquí ya no hay tantas cosas puedan voltearte. Levanta el mentón, aprieta los dientes, clava la mirada en el horizonte y… vuelve a empezar!

13. En el 2013 comienza dando, regalando, brindando, cediendo. Todo vuelve. Y aumentado. Es una  ley implícita.

14. Sigue tu impulso, atiende a tu intuición, pero considera a los demás en tus decisiones. Piensa en grande, paso a paso.

15. Detecta denominadores comunes, factores que reiteras y te producen resultados. Y agrega una alta dosis de ellos en cada nuevo  proyecto.

16. Sola. Solo. Con gente. Con amigos. En voz alta o en voz baja. No soberbia, sino orgullo. Vas bien. Muéstralo e inspira a otros.

17. Si hubieras hecho.. ¿qué cosa?…¿en qué momento?… ¿involucrando a quién más?… podrías haber cambiado el rumbo de los acontecimientos?

18. Uno aprende mucho de lo que enseña, porque en el feedback está el secreto.  No olvides transferir urgente aquello que sabes y vuelve a crearte espacios para seguir aprendiendo.
19. Nada en este mundo se hubiera hecho realidad  si los creadores hubieran esperado a que estuvieran  todas las condiciones dadas para largarse. Si ellos no lo hicieron, ¿por qué tu?
20.  Si se parece al ‘quiero más de esto’, vas bien. Si el tiempo te demostró que no fueron tan acertadas, recuerda que fueron  sólo eso, decisiones. Nadie nos garantizó que todas las decisiones que tomaríamos serían acertadas. Aprende a vivir con el valor de haberlas tomado.
21. Vivimos en una tensión dinámica, donde los límites máximos y mínimos establecen perímetros de compromiso. Expande los tuyos y confía en los demás, animándote a sentir la vulnerabilidad que emana de esa confianza.
22. De TI mismo. ¿De dónde más?