No puedo estar más de acuerdo con eso.
Bueno, si no estoy de acuerdo con lo que yo mismo digo estoy complicado…
¿Por qué lo aseguro?
He estado el tiempo suficiente en ambas áreas como para corroborar que las 5 prácticas que requiere un vendedor para conectar con sus clientes y vender soluciones son las mismas que utiliza un líder para co-crear una plataforma de valores, inspirar visiones de solución, setear propuestas y objetivos, mantener conversaciones productivas y celebrar resultados.
Sigamos.
Hagamos otro paralelismo…
Cuando quienes vendemos – o lideramos – nos salteamos conversaciones críticas (por ignorancia, racionalización o emocionalidad limitante) – o permitimos que nuestros clientes (o miembros del equipo) eviten ciertas conversaciones difíciles (hablo de decisiones con respecto a nuestro accionar) – las probabilidades de que perdamos esa oportunidad de venta (o crecimiento colectivo) se incrementa.
Y si en VENTAS hay que aprender, practicar y adaptar las fases claves de ambos ciclos (de venta y de compra), para luego, ser lo suficiente creativo para moverse dentro de una ‘autopista conversacional’, en el LIDERAZGO hay que practicar tanto el insight – la pausa para la reflexión y la conciencia de vulnerabilidad – como el feedback / feedforward, de manera de conectar desde lo humano, no solo desde lo profesional.
Y una vez que nos subimos a esa autopista conversacional, te digo algo – y voy a ser directo -: o le agregamos valor al cliente (o miembro del equipo) o les estaremos haciendo perder tiempo.
Y la diferencia se nota porque si el cliente percibe que le estás agregando ‘valor’, tendrás otra reunión en camino, una propuesta por presentar, un servicio por diseñar o un producto por enviar.
Y si esa persona de tu equipo percibe que tu intención, al marcarle un error o celebrar una conducta efectiva es legítima y auténtica, querrá corregir su accionar o mantener ese standard, porque tu liderazgo l@ está ayudando a crecer.
Simple.
¿VALOR? No hablo de un speech sobre lo bueno de tus productos o servicios: me refiero a que el cliente escuche de vos una confirmación del sentido que tendría, para él, eliminar o reducir los obstáculos que le están impidiendo crecer.
¿VALOR? No hablo de una serie de indicaciones de lo que debería haber hecho la persona ni de un kit de propagadores de culpa: me refiero a un acuerdo en cuanto a los resultados de su accionar, a las lecciones aprendidas y a las razones de un nuevo plan de acción para la próxima vez, esos que te también te ayudan a crecer.
¿Viste que son muy similares?
Entonces, si los ‘procesos’ tomaron prestada la ‘agilidad’ de la teoría de sistemas ¿qué esperás para entrenar liderazgo en tus vendedores y entrenar a tus líderes en técnicas de ventas?
Acelerá tus ventajas competitivas, fortalecé al equipo y deleitá a tu cliente con el valor que manifiesta tu gente. Esa tríada es la clave. Hasta el próximo news!
Alejandro