Asumo que esta pandemia ya te ha enseñado algo. Como a mí, como a todos.

Asumiré también que tienes gente a cargo por quienes respondes.

Seguramente también cambiaste algunos hábitos (dejaste de hacer cosas o comenzaste a hacer nuevas).

Una de esas cosas que cambiaste pudo haber sido la manera de liderar a tu equipo. Si lo hiciste y estás viendo resultados, estás en modo ‘aprendizaje’, ok.

Pero si aún sigues tratando de ‘manejar’ a tu gente – o esperando que ellos se mantengan, respondan, comuniquen, reporten y operen en el mismo modelo mental que antes de la pandemia – estamos en problemas…

Porque necesitas migrar a una versión superior para poder encarar este fenómeno.

Sin embargo, no te culpes si no lo hiciste aún, te agarró descuidad@. También a mí, a tu gente, a los clientes. Pero cada vez hay menos excusas. Tienes que generar un cambio. Y empezar por ti mism@.

Veamos 4 cosas que puedes hacer para moverte al nuevo estadío, a esta nueva versión de líder.

Comienza con 2 FACTORES CLAVES PERO CON FOCO EN TU GENTE:

• CHEQUEAR LA INFRAESTRUCTURA DE ACCIÓN

Quiero que te asegures que la notebook, la tecnología para la conexión, el software propietario de la compañía y todo acceso remoto a lo que fuera necesario, en términos de usuario y contraseñas, esté seteado y disponible, de manera que tu equipo pueda focalizarse sin impedimentos en aquello que aporta valor al negocio y los clientes, evitando dispersiones e ineficiencias.

• CHEQUEAR LOS RITUALES DE EFECTIVIDAD

Aun teniendo todo el soporte e infraestructura tecnológica, puede que todavía tu gente no haya encontrado el ‘ritmo’ que solía tener antes de esta pandemia. Y tiene que hacerlo, por si esto sigue o por si parte de lo que necesitarás en el futuro cercano se mantendrá virtual. Y es normal que se sientan un poco desorientados: no hay reuniones, no hay viajes, no está la adrenalina del 1:1…. Así que quiero que le preguntes, a cada uno de los miembros de tu equipo, cómo se está organizando, por ejemplo, al extrovertido para seguir obteniendo su energía del contexto y al introvertido generando su espacio reservado para la reflexión.

Pd. Si no están los recursos, tendrás que negociar internamente para conseguírselos, lo antes posible. Si no tiene la rutina, ayúdale a crear una…

Continúa con 2 FACTORES CLAVES PERO CON FOCO EN TI MISM@

• GENERA UN MIX DE MANERAS DE ESTAR EN CONTACTO

Si lo de arriba ya está seteado, ahora quiero que pienses, el POR QUÉ (lo que te mueve a contactarte), el PARA QUÉ (con qué objetivo lo harás), CÓMO (por qué canal, modalidad y frecuencia) y el QUÉ (el contenido de la conversación). Asumiré, a los fines de este artículo, que tienes el “por qué” y el “para qué” claro. Si vamos al “cómo”, lo mejor sería que establezcas una secuencia óptima de conexión, por ejemplo, una vez por semana con todo tu equipo y reuniones espontáneas con cada persona, según necesidad y deseo. Esta disciplina organiza y mantiene el espíritu de equipo en marcha. Tu gran objetivo es que la gente sienta que es parte de algo y sepa lo que está pasando. Muestra equidad en la cantidad de conversaciones con cada uno de ellos. No querrás que nadie se sienta aislado.

• MUEVETE DE UN MODELO DE “CONTROL” A UNO DE “AUTONOMÍA FOCALIZADA”

Y sí,  no puedes verlos. No puedes resolver sus problemas con la facilidad que lo podrías hacerlo en la oficina. No puedes saber si están haciendo lo que tenían que hacer. ¿Y qué harás? Violarás la cuarentena para ir hasta sus casas a chequearlo? No es conveniente… Más allá de la multa, estás subestimando tu liderazgo.

Es tiempo de CONFIAR.

Si co-crearon contigo sus objetivos, si te tienen a un whatsapp de distancia e interpretaron correctamente el propósito de porqué harán lo que harán, dales espacio. Confía.

Ya que no puedes chequear el proceso, focalízate en los resultados. Y si los resultados no están a la altura y no son lo que esperabas, haz que la persona te explique su proceso de pensamiento y acción o, en otras palabras, lo que lo llevó a generar esos resultados. Al decodificar su manera de organizarse, planificar y accionar, notarás un patrón de improductividad que podrás revertir con buen feedback.

¿Eres nuevo en la posición? ¿No sabes cómo dar feedback y feedforward que influencie un cambio de comportamiento? Aprende rápido. Encuentra la manera de elevar tu influencia, pero no a prueba y error, investiga, ahonda en el proceso. Porque cada momento de verdad con cada una de las personas de tu equipo moldea su impresión sobre ti. Si no lo haces, no solo los resultados del trimestre estarán en juego, sino las posibilidades de que la estrategia en sí se implemente en la práctica.

Pd. El no poder aclarar los propios ‘porqués y paraques’ podría ser la razón de la falta de desconfianza en tu gente. Es urgente e importante que confíes en tus propios motivos para que puedas confiar en el de los demás.

Resumiendo, mucho de lo que hacías personalmente puedes replicarlo on line. Pero si no lo hacías antes, más difícil te resultará ahora.

Entrénate (y/o entrena a tu gente) en estas prácticas de liderazgo y tendremos jefes, organizaciones, colaboradores y clientes fortalecidos de esta transición, que vino, indiscutiblemente, a enseñarnos algo.

Y entremos en contacto AHORA, hay mucho por hacer!

Alejandro

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